En el Caribe colombiano, una red de mujeres migrantes y colombianas trabajan juntas en contra de las violencias machistas

Son más de 210 lideresas colombianas y venezolanas que hacen parte del proyecto ‘Más allá de las banderas somos mujeres’, de ONU Mujeres apoyado por la Oficina de Población, Refugio y Migración de Estados Unidos (PRM, por sus siglas en inglés) y en alianza con la Universidad del Norte.  La Red Caribe de Mujeres Colombo-Venezolanas enfrenta las problemáticas de sus comunidades mediante planes de incidencia que avanzan con creatividad, conocimiento técnico y liderazgo comunitario.

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Foto: ONU Mujeres
El nodo de lideresas de Barranquilla de la Red Caribe de Mujeres ColomboVenezolanas  es uno de los 7 grupos de liderazgo territoriales en la costa caribe colombiana que le apuestan a la transformación en sus comunidades a través de planes de incidencia. Foto: ONU Mujeres/Tico Angulo

En la comunidad circulaban rumores. Rumores de que la madre de Juana* la maltrataba. Los gritos y golpes perturbaban a varios vecinos. En La Cangrejera, también se oían otros rumores: un nieto agredía a su abuela bajo el efecto de las drogas. Aunque la comunidad y los nombres variaban, para Ana Sayago, lideresa barranquillera, estos casos eran una constante que la seguían a donde fuera.

Ana es una de las 210 lideresas de la Red Caribe de Mujeres Colombo Venezolanas, creada en el marco del proyecto “Más allá de las banderas somos mujeres”, de ONU Mujeres y la Oficina de Población, Refugio y Migración de Estados Unidos (PRM por sus siglas en inglés), en alianza con la Universidad del Norte. Este grupo de lideresas de Barranquilla, Cartagena, Maicao, Santa Marta, Soledad, Valledupar y Riohacha se han unido para resolver y encontrar soluciones a problemáticas que las mujeres en su comunidad viven.  

La violencia en contra de las mujeres, la falta de oportunidades económicas, la sobre carga en trabajos de cuidados son las problemáticas que más persisten en las comunidades en las que trabajan las lideresas que hacen parte de la Red. Con habilidades de liderazgo potenciadas por ONU Mujeres y PRM (por sus siglas en inglés), estas lideresas decidieron actuar, aprender sobre herramientas y conocimientos para dar soluciones a la problemática de la violencia contra las mujeres en el Caribe, encontrándose en el camino con los planes de incidencia con los que identifican actores clave y acciones para transformar sus realidades.

En cada territorio, 30 lideresas unidas en un nodo local de liderazgo se encontraron durante más de 2 meses para discutir y llegar a acuerdos sobre cuáles son sus problemáticas y las posibles y creativas soluciones que proponían.  Después de eso, debían volver a sus comunidades, confirmar con las mujeres si esto era realmente un problema y luego volver a reunirse con las lideresas del nodo para tener clara la problemática.

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Foto: ONU Mujeres/Tico Angulo

Todo esto posibilitó la puesta en marcha de un plan de acción, el cual avanzó con una asignación de recursos económicos para que las propuestas que las lideresas hicieron se pudieran materializar. Esto contribuyó a su agenciamiento y liderazgo comunitario que dejó como resultado ferias educativas y de empleo, diálogos y pactos con la institucionalidad, encuentros con jóvenes y espacios de sensibilización sobre temas de prevención de VBG con hombres de la región. Las alianzas con alcaldías, gobernaciones, secretarías de la mujer, entre otros, han sido fundamentales para que el proceso tome fuerza y forma.

Como parte del cierre de los planes de incidencia, se realizará una socialización con los aliados sobre los impactos y resultados del proceso. Esta evaluación permitirá identificar  las prácticas a mejorar, así como continuar con los  aspectos que hayan funcionado de cara a la nueva fase del proyecto, que inicia en octubre de 2024.

Con ‘Más allá de las banderas somos mujeres’ se ha trabajado con la Universidad del Norte, la Fundación Cedesocial y Funsarep, posibilitando que lideresas como Ana Sayago sigan construyendo puentes de diálogo y estén organizadas políticamente frente a los desafios que enfrentan las mujeres migrantes y colombianas en la costa caribe colombia. En su segunda fase, el proyecto trabajó con más de 16 mil mujeres migrantes y de comunidades de acogida, contribuyendo a una perspectiva que ve en la migración una oportunidad de avance social y económico.

Foto: ONU Mujeres