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Contexto colombiano
En Colombia defensoras de derechos humanos enfrentan importantes barreras para el ejercicio de su liderazgo, así como riesgos diferenciados por el hecho de ser mujeres, pues hay una persistencia de estereotipos de género que favorecen la estigmatización y la sanción social al liderazgo femenino por fuera de los ámbitos privados y domésticos.
En muchas ocasiones sus reivindicaciones públicas sobre el derecho a tener derechos y defenderlos son interpretadas como una transgresión a sus roles tradicionales asociados a la maternidad y el cuidado, de allí que, en el marco de su labor como defensoras, no sólo se vean expuestas a diversos tipos de violencia ejemplarizante y aleccionadora, incluida la violencia sexual, sino que la violencia o la amenaza de violencia contra sus familias, en especial contra sus hijos e hijas, son utilizados como forma de castigo y amedrentamiento.
Según el más reciente informe de la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), en el 2023 se verificaron 98 masacres con un total de 320 víctimas (46 eran mujeres), 105 casos de homicidios de personas defensoras de derechos humanos (14 eran mujeres) y se registraron 763 casos de amenazas, de los cuales 186 fueron perpetradas en contra de mujeres, 9 en contra de población LGTBIQ+ y 22 fueron amenazas colectivas. En 26 casos las amenazas y ataques podrían llegar a constituir violencia de género. Asimismo, la Oficina también recibió 100 alegaciones de violencia basada en género incluyendo violencia sexual en el marco del conflicto armado.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo registró en el 2023 181 homicidios en contra de líderes y lideresas, de los cuales 21 fueron perpetrados en contra de mujeres, siendo los sectores de liderazgo más afectados los liderazgos comunales, indígenas, comunitarios y campesinos, los departamentos con mayor concentración de homicidios son Cauca, Antioquia, Nariño, Valle del Cauca y Córdoba.
ProDefensoras representa entonces una oportunidad para mitigar los riesgos a los que se exponen las lideresas y defensoras de derechos humanos en el país y responder así de manera integral junto con la implementación del Plan de Acción Nacional del Programa Integral de Garantías para Lideresas y Defensoras de Derechos Humanos bajo responsabilidad del Gobierno Nacional a la seguridad de las mujeres.
Igualmente, la iniciativa busca dar cumplimiento a la histórica resolución sobre Protección de las Defensoras de los Derechos Humanos y las Personas Defensoras de los Derechos de la Mujer adoptada en 2013 por la Asamblea General de las Naciones Unidas para reconocer la importante contribución que las mujeres defensoras de los derechos humanos realizan en la construcción de la paz, la justicia y la igualdad, reconoce los riesgos, la discriminación y la violencia sistemáticas que enfrentan las defensoras de los derechos humanos y exhorta a los Estados a adoptar políticas y programas concretos que incorporen una perspectiva de género para crear un entorno seguro y propicio para el desarrollo de su labor.
Con las defensoras en el centro de los esfuerzos para la reconstrucción del tejido social, Colombia tiene la oportunidad de acelerar la construcción de la paz evidenciando que la protección y dignificación de su labor es un paso hacia el camino de la no repetición.