Acompañamos diálogo con organizaciones de mujeres para avanzar en apoyo a sus agendas en clave de paz en los territorios

Este espacio se dio en el marco de la visita del del Fondo de las Naciones Unidas para la Paz y la Acción Humanitaria (WPHF) a Colombia, en la que defensoras de derechos humanos tuvieron oportunidad de establecer diálogos para que haya mayor financiación a la construcción de paz que adelantan desde sus organizaciones.

Este 24 de septiembre en la Casa Común de Naciones Unidas, organizaciones de mujeres del Cauca, Meta, Bogotá, entre otros territorios, se encontraron con diversas agencias del Sistema de Nacional Unidas, Gobierno Nacional y cuerpo diplomático para sostener un diálogo en clave de los desafíos que enfrenten las mujeres en los territorios para avanzar en la defensa de la paz y ver oportunidades de apoyo a su trabajo. 

Durante el espacio, que sucedió en el marco de la visita del Fondo de las Naciones Unidas para la Paz y la Acción Humanitaria (WPHF, por sus siglas en inglés), Sophie Giscard d’Estaing, comentó que “el trabajo que las organizaciones de mujeres han hecho es fundamental porque han garantizado que las voces de las mujeres de diversos lugares de Colombia estén en el centro de la construcción de paz del país, a pesar de los desafíos de implementación del Acuerdo de paz”. 

A su turno, la viceministra de las mujeres del Ministerio de la Igualdad y la Equidad, Tamara Ospina, comentó que “estamos en un momento muy desafiante en clave del Acuerdo de paz y estamos desde el Gobierno Nacional contribuyendo no solo al silenciamiento de los fusiles sino también en términos de justicia social. En ese sentido, es fundamental el trabajo que hagamos con las defensoras de derechos humanos porque son ellas las que están en los territorios”. 

Maria Inés Salamanca, representante adjunta de ONU Mujeres en Colombia, comentó que hay que “fortalecer el financiamiento a las organizaciones, de mujeres y feministas en su amplia diversidad, bajo una mayor comprensión de las barreras que enfrentan para su participación en la paz. Para ello, se requiere aumentar el porcentaje de los fondos dentro de la Asistencia oficial para el desarrollo, el apoyo directo y flexible a las organizaciones de mujeres nacionales y locales que se movilizan por la paz en medio de  entornos de crisis y persistencias conflictivades incluidas las armadas, asegurando enfoques holísticos de acompañamiento que promuevan activismos sostenibles y entornos seguros y garantistas para su labor”.

De acuerdo con Mayda Roldán Velázquez, del colectivo de mujeres ‘enredhadas’, el apoyo que el multilateralismo ha ofrecido a las organizaciones de mujeres “ha sido fundamental para permitirnos sembrar esperanza donde antes había guerra. Las mujeres en Colombia hemos podido consolidar un Acuerdo que nos ha permitido ser agentes de cambio. El territorio es el lugar para el arraigo y la permanencia y queremos seguirle apostando a la resolución pacífica del conflicto que nos permita seguir estando en los territorios”.

Este espacio contó también con la participación de los representantes de las embajadas de Noruega, Suiza, Chile, entre otros altos cargos de entidades del Sistema de Naciones Unidas que se espera redunde en financiación más robusta para apoyar la agenda de construcción de paz en Colombia.