Reincorporación con perspectiva de género
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A partir de la firma del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera entre el gobierno colombiano y las FARC-EP en 2016, empezó el proceso de desmovilización y posteriormente la reincorporación de 12.694 excombatientes a la vida civil.
En el Acuerdo de Paz se señaló que este proceso debía tener un enfoque diferencial con énfasis en los derechos de las mujeres, teniendo en cuenta que aproximadamente el 25% de los excombatientes de esa guerrilla son mujeres. El proceso de reincorporación ha supuesto para ellas retos relacionados con nuevos roles, como la maternidad y la conformación de núcleos familiares, además de la participación en proyectos productivos o en espacios de participación ciudadana. Las Resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, como la 1325, constituyen un marco de referencia que insta a los Estados a promover la participación de las excombatientes en los procesos de paz y en la etapa de reincorporación. Esto se materializa actualmente en Colombia, en los territorios rurales y a nivel urbano, con la transformación de muchas mujeres lideresas de exguerrilleras a constructoras de paz, gracias a sus propios esfuerzos y con el apoyo del Estado y al trabajo conjunto con el Consejo Nacional de Reincorporación, Comunes, la cooperación internacional y la sociedad civil.
En 2017, las firmantes del Acuerdo de Paz definieron de manera participativa la estrategia de reincorporación integral para las mujeres excombatientes. En dicha estrategia se priorizaron acciones específicas en lo social, económico, jurídico y político. Paralelamente, en el marco del Consejo Nacional de Reincorporación (CNR), se creó la Mesa Técnica de Género, en la que participan representantes del gobierno nacional y de las antiguas FARC-EP, ahora Comunes. Desde esta instancia, se incluyó la perspectiva de género en el CONPES 3931 en 2018, el cual contempla 18 acciones específicas para garantizar la transversalización del enfoque de género en las diferentes políticas, programas y medidas afirmativas para las mujeres en proceso de reincorporación. Este avance es de gran importancia y constituye la agenda que guía la política pública en materia de reincorporación.
Han transcurrido varios años desde la firma de los acuerdos y el proceso de reincorporación social, económica y política de los excombatientes avanza gracias a las políticas públicas implementadas por el gobierno nacional y los gobiernos locales y con los esfuerzos complementarios por parte de la cooperación internacional y sectores académicos y de la sociedad civil. Sin embargo, en este proceso persisten desafíos, especialmente para las mujeres, en cuanto al pleno goce de sus derechos, la consolidación de su autonomía económica y su fortalecimiento organizativo.
La reincorporación social, económica y política de las y los excombatientes sigue siendo una prioridad para la construcción de una paz sostenible en los territorios. Esta, contribuye a la reconciliación comunitaria, al fortalecimiento del tejido social y a la prevención de violencias y conflictos.
En este contexto, ONU Mujeres, en concordancia con la política nacional, las prioridades de género establecidas en el CONPES 3931 y el marco de cooperación de las Naciones Unidas con el gobierno nacional, está acompañando el proceso de reincorporación con una perspectiva de género. Esto incluye el fortalecimiento de la ciudadanía de las excombatientes, su empoderamiento económico y la prevención de violencias basadas en el género (VBG), así como los desafíos relacionados con la construcción de masculinidades corresponsables con los hombres excombatientes.
ONU Mujeres lleva a cabo su intervención en coordinación con la Agencia de Reincorporación y Normalización (ARN). Además, trabaja en colaboración con la Misión de Verificación de las Naciones Unidas, con agencias del Sistema de las Naciones Unidas como UNICEF, PNUD y PMA, y cuenta con el apoyo de aliados estratégicos como la Embajada de Noruega, la Embajada de Suecia y el Peacebuilding Fund. Asimismo, realiza su intervención con socias implementadoras de la sociedad civil como la Liga Internacional de Mujeres para la Paz y la Libertad (LIMPAL) Colombia.
Es evidente el protagonismo de las firmantes del Acuerdo de Paz en el proceso de reincorporación, tanto en la vida económica, social y política, en zonas urbanas como rurales. Su papel como constructoras de paz se fortalece cada día y ONU Mujeres contribuye a su autonomía y empoderamiento.
